Mi ex se niega a vender la casa: ¿Qué puedo hacer?
Luego de un divorcio o una separación, uno de los asuntos más complicados de gestionar es la vivienda que se tiene en común, especialmente si tus intereses son distintos a los de tu ex pareja, lo que dificulta mucho el hecho de llegar a un acuerdo.
En este artículo vamos a ver las soluciones que tienes y las cuestiones legales a tener en cuenta para esta situación.
3 Soluciones si tu ex no quiere vender
Vamos a ver las principales alternativas que tienes para solventar esta situación. Damos por hecho de que ya has intentado llegar a un acuerdo de forma amistosa, pero no ha dado resultado.
Acto de conciliación
El acto de conciliación es un procedimiento legal previo a una demanda judicial que tiene como objetivo resolver un conflicto de manera amistosa y sin necesidad de ir a juicio. Es una herramienta útil en situaciones en las que las partes no logran llegar a un acuerdo por sí mismas, como en casos de conflictos de copropiedad, separaciones o divorcios.
División de la cosa común
Si lo anterior no ha funcionado, te queda iniciar un procedimiento judicial con el fin de realizar la extinción del condominio, interponiendo una demanda llamada división de la cosa común, que tendrá como resultado dos posibles escenarios.
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El juez dicta que uno de los dos tiene que quedarse con el 100% del pleno dominio de la vivienda, compensando económicamente al otro por su mitad del inmueble.
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La sentencia dice que el inmueble tiene que salir a una subasta pública, y una vez vendida la vivienda, el dinero se repartirá proporcionalmente según el porcentaje de cada propietario, que normalmente es el 50% para cada uno.
La desventaja que tiene este punto es que es proceso muy largo y desgastante a nivel mental, emocional y económico.
Vender tu parte de la casa
Otra alternativa que tienes es vender tu porcentaje de propiedad del inmueble a un tercero, a esto se le conoce como vender un proindiviso, y entre los posibles compradores que puedes encontrar están los inversores privados o empresas que compran proindivisos.
Si quieres saber cuánto vale tu proindiviso, nosotros podemos valorar tu caso gratis y sin compromiso, para que puedas tener información útil a la hora tomar la decisión de qué alternativa es la mejor para ti.
¿Cómo obligar a tu ex a vender la casa?
Vamos a responder la pregunta más frecuente de este tema, ¿Cómo puedo obligar a mi ex a vender el piso? La respuesta desafortunadamente es que no puedes hacerlo, ya que para realizar cualquier gestión del bien todos los propietarios deben estar de acuerdo, algo similar pasa en las herencias cuando alguno de los hermanos se opone en la venta de la casa.
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Mi casa tiene hipoteca ¿La puedo vender?
Es muy común que en estas situaciones siga existiendo una hipoteca compartida, porque estos créditos duran una media de 30 años y lamentablemente pocas relaciones aguantan más de eso.
Una vivienda se puede vender en el mercado si tiene hipoteca, es un proceso legal y nadie te lo puede impedir, pero hay un tema muy importante a tener en cuenta y es que la demanda para estos inmuebles que tienen una carga de este tipo es prácticamente nula, sin mencionar que a la gran mayoría de los particulares no les conceden financiación para una operación así, por lo tanto, solo podrás contar con algún inversor dispuesto a afrontar esta compra.
¿Puedo vender mi parte si la vivienda está hipotecada?
Si, al igual que puedes vender la casa completa, también puedes vender tu proindiviso aunque tenga una hipoteca, sin embargo, como es lógico, las ofertas que recibirás se verán muy afectas por esta carga.

¿Qué pasa cuando alguno de los cónyuges tiene el usufructo?
Otro escenario bastante común es que uno de los cónyuges se quede con el uso y el disfrute de la vivienda, este caso se da principalmente cuando hay hijos en común, menores de edad y dependientes económicamente.
A continuación vamos a ver un ejemplo detallado de como se puede desenvolver esta situación.
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Ejemplo práctico
Juan y Marta, una pareja que estuvo casada durante 12 años, tienen dos hijos menores, Lucas (10 años) y Clara (7 años). Tras su separación, deciden divorciarse y el caso pasa a los tribunales debido a desacuerdos sobre la vivienda familiar.
Situación inicial
La vivienda familiar, valorada en 250.000 €, está a nombre de ambos cónyuges al 50 % cada uno. Ambos contribuyeron al pago de la hipoteca, que todavía tiene un saldo pendiente de 50.000 €.
Marta tiene la custodia exclusiva de los dos hijos, y Juan tendrá un régimen de visitas establecido por el juez.
Decisión del juez
En la sentencia de divorcio, el juez decide:
- Atribuir el uso de la vivienda familiar a Marta y los hijos menores.
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Esto se basa en el interés superior de los hijos, quienes necesitan mantener su entorno estable.
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Juan, como cotitular del inmueble, pierde el derecho a usar la vivienda mientras los hijos sean menores de edad o hasta que finalice el uso atribuido en la sentencia (por ejemplo, cuando los hijos sean económicamente independientes).
- Pago de la hipoteca restante:
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El juez no modifica la titularidad del inmueble ni la responsabilidad compartida de la hipoteca.
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Aunque Marta tiene el uso exclusivo de la vivienda, ambos deben seguir pagando el préstamo hipotecario al 50 %, a menos que lleguen a un acuerdo diferente.
Conflicto
Tres años después del divorcio, Juan quiere vender su parte del inmueble porque:
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No tiene acceso a la vivienda y siente que no obtiene beneficios de ser copropietario.
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Quiere liberarse de la responsabilidad de pagar la hipoteca.
Sin embargo, Marta se niega a vender la casa, argumentando que:
- Es el hogar de los hijos menores.
- No puede permitirse pagar toda la hipoteca por sí sola ni adquirir la parte de Juan.
Opciones legales para Juan en esta situación:
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Juan podría ofrecer venderle su parte del inmueble por un valor razonable o negociar que Marta asuma la totalidad de la hipoteca. Sin embargo, esto requiere que ambas partes estén dispuestas a llegar a un acuerdo.
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Juan podría intentar vender su 50 % del inmueble a un tercero o a una empresa especializada en la compra de proindivisos. Aunque esto puede ser complicado si el uso de la vivienda sigue atribuido a Marta, ya que dificulta la venta para un comprador externo.
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Si no hay acuerdo, Juan puede recurrir a la vía judicial y solicitar la extinción de condominio. En este caso, el juez decidirá:
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Si se realiza una subasta pública del inmueble, repartiéndose el valor obtenido entre ambos (descontando la hipoteca pendiente).
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Si mantiene el uso exclusivo para Marta y establece una compensación económica para Juan.
Conclusión del ejemplo
Este caso muestra cómo las decisiones judiciales pueden complicar la situación de copropiedad tras un divorcio, especialmente cuando hay hijos menores involucrados. Aunque Juan tiene derecho sobre su 50 % del inmueble, el derecho de uso atribuido a Marta y los niños limita sus opciones. Buscar asesoramiento legal temprano y negociar acuerdos puede evitar conflictos mayores.
Análisis final
Para hacer un resumen rápido, si tu ex pareja se niega a vender la casa, tienes 3 opciones.
Un acto de conciliación, que consiste en intentar llegar a un acuerdo mediante la intervención de abogados y así evitar los tribunales.
La segunda es iniciar un procedimiento judicial para poner fin al condominio, esta es una opción que puede terminar en una subasta o en que alguno de los dos se adjudique el bien completo a su nombre.
La tercera opción es vender tu proindiviso, es una opción que conllevaría una disminución de valor importante, pero a cambio te desvinculas y recibes liquidez inmediata, lo bueno es que es un proceso muy ágil, por lo tanto, te ayudará a pasar página cuanto antes.
Preguntas frecuentes sobre si tu ex se niega a vender
¿Qué pasa si en un divorcio uno de los dos no quiere vender la casa?
Si uno de los cónyuges no quiere vender, se puede intentar un acuerdo amistoso o, en caso de desacuerdo, iniciar un procedimiento judicial de extinción de condominio para forzar la venta, normalmente a través de una subasta.
¿Qué pasa si mi ex no quiere vender el piso?
Si tu ex se niega, puedes negociar para que compre tu parte o venderla a un tercero. Si no hay acuerdo, puedes recurrir a la vía judicial para resolver la situación.
¿Cuántas personas tienen que estar de acuerdo para vender una casa?
Todos los propietarios deben estar de acuerdo para vender la casa. Si no hay consenso, se puede acudir a la vía judicial para disolver la copropiedad.
¿Qué pasa si un familiar no quiere vender la casa?
Si un familiar se opone, puedes negociar con él o iniciar una acción judicial de división de la cosa común para forzar la venta o la adjudicación del bien.